Alrededor de 200 familias que fueron desalojadas en el barrio Los Solares, en Cancino Adentro, de este municipio oriental, continúan encarando la dura vida de vivir a la intemperie.

Todo el componente familiar vivió sus peores momentos desde que una pala mecánica, protegida por fuerzas de policía, acompañada de lo que denominaron “una turba” que el pasado lunes intimidó a los vecinos con armas blancas y cargó con pertenencias de las familias.

Para comer, las familias han improvisado un fogón comunitario donde cocinan los alimentos que consiguen y los comparten entre todos.