Los bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza han dejado al menos 900 muertos y más de 4,500 heridos, según un comunicado difundido este martes por el Ministerio de Sanidad palestino, que ha pedido la apertura de un pasillo humanitario para recibir material médico y evacuar a heridos graves.

"Por cuarto día consecutivo, la brutal agresión a Gaza continúa con la máxima ferocidad, cometiéndose deliberadamente crímenes contra la humanidad. Toma como objetivo barrios residenciales y destruye hogares con los habitantes dentro. Esto refleja su intención de llevar a cabo un acto genocida", asegura el comunicado.

Según el recuento ofrecido por el Ministerio, entre los 900 muertos hay 260 niños y 230 mujeres, así como seis trabajadores de salud y ocho periodistas.