Peru.- Rosalino Flores, un joven de 22 años que recibió el impacto de 36 perdigones el pasado 11 de enero en la ciudad de Cuzco durante las protestas antigubernamentales de Perú, murió este martes en el hospital de Lima donde se encontraba hospitalizado, lo que elevó a 49 el total de víctimas mortales de la represión de las manifestaciones.

Flores, quien era estudiante de gastronomía, recibió el pasado 11 de enero el impacto de 36 perdigones disparados desde muy cerca por agentes de la Policía Nacional que reprimían a los manifestantes, según afirmó poco después del incidente su hermano Juan José y quedó registrado en cámaras de seguridad de la zona.